miércoles, 6 de junio de 2012

Un buen docente marca una diferencia



¿Influye en el alumno el tener un docente que se preocupe por su aprendizaje y a su vez intente innovar a la hora de impartir sus conocimientos?
Ésta es la pregunta que desarrolla Antonio Bolívar en su texto ‘’Un buen docente marca una diferencia’’
Así, encontramos en el mismo relaciones entre el rendimiento de los alumnos y la actitud de sus tutores; Por ejemplo, los maestros menos eficaces se limitarán a seguir la llamada ‘’enseñanza tradicional’’, un yo ‘’mando’’ y tu escuchas y lo memorizas (sin entender el por qué en la mayoría de los casos, los alumnos sacan peores notas), en cambio los maestros más eficaces exhiben habilidades técnicas cuando enseñan en clase, tienen altas expectativas en los alumnos, planifica las lecciones de forma que el alumnado se sienta más cómodo a la hora de aprender los contenidos y lo más importante, buscará nuevos métodos que le ayuden en su continua formación y nuevos agentes motivacionales que provoque en sus alumnos el deseo de aprender más.

“La calidad de un sistema educativo no puede ser mejor que la calidad de sus docentes” (Barber y Mourshed, 2007)
Esta cita en mi opinión es la clave del tema. No podemos querer como docentes un sistema educativo de más calidad si nadie intenta arreglarlo. Si contamos con docentes que se basan en la enseñanza tradicional tendremos un sistema educativo basado en la misma.

¿Y la motivación? ¿Es realmente necesaria en los alumnos? Pues si los alumnos de un profesor/a no están motivados, solo conseguirá que sus alumnos/as repitan lo que memorizan sin llegar a entenderlo, cosa que puede llevarlos hacia el suspenso (No les importan las lecciones, no las entienden y les aburre memorizarlas). Si se sabe llegar a motivar a esos alumnos, estos tendrán interés no solo en atender, sino en averiguar el por qué del temario que estén estudiando. Así, la información queda almacenada a largo plazo en las memorias de esos niños y niñas (ya no solo les ayuda a mejorar el rendimiento académico, sino en su formación individualizada como personas).

En definitiva, creo que un buen docente es el que busca la motivación para cada uno de sus alumnos, busca caminos alternativos para hacerles comprender a sus alumnos el temario, el que ve al grupo no como un grupo de personas iguales, sino como un grupo de personas de la misma edad totalmente diferente el uno del otro, cada uno con sus problemas y capacidades. También el que no da por finalizada nunca su formación, buscando nuevos métodos de enseñanza y el que ayuda a sus compañeros a seguir ese modelo de enseñanza.

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